El mejor monumento de Menorca… es su atardecer: la isla de los pequeños placeres está repleta de lugares de postal en los que olvidarse del tiempo y disfrutar de la caída del astro rey
Nadie se atreve a discutir la belleza de esta isla repleta de tesoros, rincones y paisajes que quitan el hipo. Durante 365 días, Menorca siempre sorprende con una experiencia, un momento, un recuerdo que permanece imborrable por aquellos viajeros que han elegido embarcarse en la increíble aventura de recorrer una isla que no decepciona. Merece la pena hacer mención a uno de sus bienes inmateriales más bonitos y buscados por los que más saben del tema... ¡Sus atardeceres!
Nadie se atreve a discutir la belleza de esta isla repleta de tesoros, rincones y paisajes que quitan el hipo. Durante 365 días, Menorca siempre sorprende con una experiencia, un momento, un recuerdo que permanece imborrable por aquellos viajeros que han elegido embarcarse en la increíble aventura de recorrer una isla que no decepciona. Merece la pena hacer mención a uno de sus bienes inmateriales más bonitos y buscados por los que más saben del tema... ¡Sus atardeceres!