En un comunicado este lunes, han celebrado que gracias a esta resolución se aprueba el plan propuesto por los acreedores, por lo que pasarán a tener el 100% del capital de la empresa "mediante la capitalización de 1.352 millones de euros de deuda convertible y parte de la deuda 'jumbo', y la extensión en cinco años de los vencimientos de la deuda restante".
Según ellos, con esta resolución los nuevos propietarios de Celsa "pasarán a ser instituciones financieras de prestigio internacional con acceso a capital, una amplia experiencia de gestión en empresas europeas y un horizonte de inversión a largo plazo".
Han asegurado que su plan "reduce los niveles de endeudamiento por debajo de los propuestos anteriormente por la empresa", lo que permitirá al grupo situarse en una posición solvente, proporcionando seguridad a los empleados de la empresa, en sus palabras.
El siguiente paso para los nuevos propietarios será trabajar con todas las partes interesadas "para implementar el plan con la máxima celeridad y asegurar el empleo".
NUEVO CONSEJO
Han informado de que la reestructuración incluirá el nombramiento de un nuevo Consejo de Administración integrado por perfiles "muy respetados y de categoría mundial".
Y han añadido que algunas de las prioridades de este Consejo serán mejorar la gestión operativa de Celsa para convertirla "en un líder europeo del sector".