Margaret Santiago, del Área de conocimiento de Empleo y responsable de cooperación empresarial para la igualdad de género de Cruz Roja, ha sido la encargada de conducir el webinar en el cual se ha desgranado “el balance más positivo”. Acompañada por Isabel Hidalgo, gerente de Comunicación, RRII y Alianzas en MásFamilia, y Palmira García, directora de Talento y Liderazgo en Pascual, han analizado los principales aspectos del informe y pormenorizado la situación de la conciliación en el mundo empresarial.
En este sentido, Santiago ha puesto de relevancia que: “nos hemos dado cuenta que la pandemia ha sido un acelerador en temas de corresponsabilidad familiar.” Y apoyándose en los datos -en relación con este tema- resaltaba que: “El 72% de los hombres afirma que ha mejorado su participación en las tareas del hogar, y el 63% las mantiene.” Aunque concluía que: “Tan solo 2 de cada 10 personas entrevistadas se han acogido alguna medida de conciliación durante el confinamiento”.
Antes estas cifras, Isabel Hidalgo dejaba claro que la conciliación: “Es un tema vital para la ciudadanía, y para los políticos. Necesitamos que los políticos se impliquen más. Y que hagan unas leyes que miren al futuro, no ancladas en el pasado”.
Y añadía: “Hemos visto que lo que más impacta a la hora de poner en marcha medidas de conciliación en una organización es todo lo que tiene que ver con el liderazgo y todas las políticas que tienen que ver con la alta dirección, aunque también se tiene que escuchar a las personas. Escuchar lo que necesita la empresa y lo que necesitan las personas es la clave para llevar a cabo unas medidas de conciliación efectivas, y que tengan efecto en la productividad”.
En esta visión coincidía Palmira García que destacaba que: “Lo que funciona en Pascual en conciliación es una escucha 360. Ver las necesidades concretas de cada persona: en diferentes áreas y en diferentes geografía. Tenemos que conocer bien sus necesidades para adaptar las medidas a cada uno de ellos. A partir de ahí trabajar codo a codo con los mandos, para que las adapten y promuevan las medidas”.
Desde un punto de vista empresarial es clave el ROI (Return of investment, por sus siglas en inglés) de cualquier tipo de medidas. En este aspecto, la directora de Talento y Liderazgo en Pascual es rotunda y considera que: “El coste de la fuga de talento es el triple de lo que podíamos haber invertido en su bienestar. En este sentido, las PYMES tienen una ventaja y es que están creando ahora su cultura corporativa en un nuevo contexto”.
Por su parte, la gerente de Comunicación de la Fundación MásFamilia añade: “Cada organización tiene que saber para qué pone políticas de conciliación”. Y pone dos ejemplos: “En Consum son ejemplo de cómo la conciliación se puede hacer con puestos presenciales. La cadena de supermercados ha aumentado un 21% la productividad de sus empleados desde que implementó medidas de conciliación. Por otra parte, Red Eléctrica señala que de cada euro invertido en conciliación tiene un retorno de dos euros”.
Según se desprende del estudio, el 34% de los hombres que han sido o serán padres recientemente afirma que la nueva ley que equipara la baja de paternidad con la de maternidad podría suponer una barrera para sus carreras. Ante este resultado de los encuestados, Isabel Hidalgo defiende que: “Es fundamental derribar la barrera de que la conciliación es un tema de mujeres y de madres. Flaco favor nos hacen los políticos con este tipo de mensajes. Tenemos que apostar por una conciliación personal. La conciliación de todos y para todos”.
Asimismo, Palmira García sentencia que: “La conciliación es más que ser madre y algo de mujeres. La conciliación es familia, pero también hobbies, disfrute personal. Hay que llegar a un equilibrio entre lo personal y lo profesional, y a partir de ahí trabajar en lo que cada colectivo necesite”.
Del mismo modo, Margaret Santiago ha resaltado como se “ha incrementado un 42% en la importancia que le dan los hombres jóvenes a las medidas de conciliación”, e Isabel Hidalgo ha puesto de relevancia como “es muy importante que las personas conozcan qué está ocurriendo dentro de su organización y que la gente conozca esa parte de salario emocional que te entrega tu empresa”.
En esta línea, Hidalgo concluye: “A las personas hay que darles la milla extra. Cuando una persona se siente reconocida y recompensada en una organización es muy difícil que salga de esa organización; y esto es muy fácil hacerlo con la conciliación. La conciliación no es un coste, es una inversión a futuro”.