Cada año aparecen dos zoonosis (enfermedades que pasan de animales a humanos, como el Covid), y las granjas son su principal foco. La producción sostenible de alimentos resulta hoy más importante que nunca. Hablamos con el fundador y CEO de la empresa, Bosco Emparanza.
A día de hoy, la alimentación sostenible resulta más indispensable que nunca antes. Según Bosco Emparanza: “A pesar de que MOA Foodtech comenzó en octubre de 2020, la idea surgió unos meses antes. Nuestra forma actual de producir alimentos es insostenible. Causa el 24% de los gases de efecto invernadero y el 80% de la deforestación, y de este, el 77% se destina a alimentación animal. Además, existen otros problemas como el abuso de antibióticos. La OMS calcula que al año aparecen dos zoonosis, como el coronavirus, que son enfermedades que pasan de animales a humanos, y las granjas intensivas son el principal foco”.
Por otro lado, trabajando en la industria agroalimentaria, Bosco identificó la ingente cantidad de subproductos y residuos que se generan en la industria agraria, a la mayoría de los cuales no se les da apenas valor, y cuya principal salida es alimentación animal. Sin embargo, esto suponía una gran oportunidad. “Con todo ello llegamos a una primera hipótesis: empleando biotecnología e inteligencia artificial podríamos transformar esa materia prima de bajo coste, que muchas veces supone un problema para la industria, en un alimento proteico de alto valor”.
Para abordar y desarrollar esta idea, Bosco decidió buscar un equipo que despuntase en sus materias, y se unieron Susana (directora científica), antes directora de innovación de la empresa farmacéutica Bionanoplus y José María (director financiero), proveniente de estrategia y M&A del BBVA. “A ambos les encantó la idea y empezamos a construir un plan tecnológico y de negocio”.
Según afirma Emparanza: “Nuestro producto, aparte de poseer un alto contenido de proteína, tiene un perfil completo de aminoácidos esenciales, beta glucanos (que mejoran el sistema inmunológico), omegas, y mayor digestibilidad que la mayoría de alternativas vegetales. Y por supuesto el impacto en sostenibilidad, pues, además de no emplear pesticidas, hormonas o antibióticos, empleamos un 98% menos de agua y emitimos un 85% menos de CO2, que la proteína de vacuno”. Además, la proteína creada por MOA Foodtech lleva vitamina B.
“Gracias a las diferentes funcionalidades del ingrediente (la proteína), estamos trabajando con la industria para desarrollar análogos de carne, alternativas lácteas, snacks y otros”.
Los proyectos de futuro de esta startup española nos la muestran claramente como una empresa innovadora y en expansión: sus proyectos para el futuro inmediato así lo respaldan: “Hemos iniciado un proyecto con Barilla, la mayor empresa de pasta del planeta. Existe un potencial brutal en emplear los residuos y subproductos de la pasta como nutrientes para nuestros microorganismos”.
A este respecto, los datos aportados por el King's College de Londres y por Marco Bertacca, CEO de Quorn Foods, resultan, cuando menos, altamente reveladores: la agricultura arable produce alrededor de ocho mil millones de toneladas de desechos de carbohidratos cada año. "Si pudiéramos encontrar una manera de fermentar esos carbohidratos y producir proteínas, produciríamos la misma cantidad de proteína que obtendríamos de cinco mil millones de vacas. Las cifras son alucinantes: son tres veces más vacas de las que hay en el planeta ahora. Entonces, incluso si pudiéramos lograr una pequeña fracción, sería un game-changer en la reducción de la huella de carbono en la producción de alimentos ", afirma Bertacca.
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