La marca sueca aseguraba recientemente que sus nuevos modelos eléctricos tendrán una única "pila tecnológica". Este sistema de software está respaldado por el chip Drive Orin de NVIDIA, capaz de realizar más de 250 billones de operaciones por segundo, unas cifras que esperan superar con los futuros procesadores en los que ya trabajan y que alcanzarán los 1.000 billones de operaciones por segundo. Una apuesta por la conectividad y los datos que juega un papel central en la hoja de ruta tecnológica del fabricante.
De igual manera, el jefe del área de Investigación y Desarrollo (I+D) de Volvo, Anders Bell, señalaba que la supercomputadora NVIDIA DGX potenciará las capacidades de entrenamiento de IA de Volvo, convirtiendo su centro de datos interno de entrenamiento de IA (liderado por su empresa de software Zenseact) en "uno de los más grandes de los países nórdicos". "Al aprovechar la tecnología NVIDIA y configurar el centro de datos podemos allanar el camino hacia una IA de alto rendimiento, lo que en última instancia ayudará a que nuestros productos sean más seguros y mejores", apostilló.
Todos estos avances tecnológicos ya se empiezan a ver en los nuevos vehículos de la marca, como es el caso del EX30, su SUV más pequeño, totalmente eléctrico. Este modelo cuenta con una pantalla central estilo tablet de 12,3 pulgadas que muestra la información del conductor de un vistazo e incluye los controles en la misma pantalla, poniendo el software al servicio del usuario y permitiéndole acceder a sus aplicaciones favoritas, como Google Assistant o Google Maps, entre otras.
El EX30 también puede girar, acelerar y frenar para aparcar por sí solo gracias al sistema 'Park Pilot Assist', como un ejemplo de lo que está por venir en lo que respecta a la conducción autónoma gracias al potencial de la tecnología. Asimismo, este vehículo tiene la menor huella de dióxido de carbono (CO2) de cualquier otro de la firma "hasta la fecha", tal y como ha añadido la propia compañía. El EX30 está disponible por 33.200 euros, aunque con las ayudas del Plan Moves el precio final podría bajar hasta los 26.200 euros.
"Nuestra duradera colaboración con NVIDIA y el uso de la plataforma NVIDIA DRIVE, probada en el área de producción, nos han permitido explorar y aplicar aún más nuestro profundo conocimiento de la seguridad a medida que entrenamos grandes modelos de IA básicos", añade la marca, incidiendo en que estos modelos se utilizan para ayudar a los automóviles a "comprender aún mejor el mundo que los rodea", todo ello con el objetivo de "mejorar la seguridad y la comodidad, al tiempo que se avanza en el desarrollo de la conducción autónoma", concluye la marca.