El ministro de Economía, Sergio Massa, viajará a Pekín el 29 de mayo para renovar y renegociar esta línea de pagos con sus homólogos chinos. Aún no está claro en cuánto pretende ampliarla Massa.
El viaje se produce en medio de los intentos del Gobierno por contener una venta masiva del peso que es parte de un círculo vicioso en la crisis inflacionaria de Argentina con los precios que subieron un 109% anual hasta abril en medio de una grave escasez de dólares.
Paralelamente, el ministro Massa también está renegociando el programa de 44.000 millones de dólares (40.915 millones de euros) de Argentina con el Fondo Monetario Internacional, tratando de mejorar las condiciones de aquí a junio.
Para China, el pago de los intercambios comerciales con otros países en yuanes es una oportunidad de seguir ampliadno el uso global de su moneda, en detrimento del dólar estadounidense. El Banco Popular de China ha firmado este tipo acuerdos de divisas con unos 40 países desde 2008 para promover el uso internacional del yuan.