Estas son, según el operador de puntos de recarga ultrarrápida Electra, las principales tendencias que impulsarán el desarrollo del sector de vehículos eléctricos este 2025:
1. Redes de recarga más rápidas y accesibles
Según los datos publicados por la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), actualmente el 43 % de la infraestructura de recarga pública en España se ubica en áreas interurbanas. Sin embargo, el 61 % de estos puntos ofrece una potencia máxima de 22 kW, lo que los clasifica como de carga lenta. Esta limitación supone tiempos de recarga de hasta tres horas, una espera que, en muchos casos, resulta poco viable para los usuarios y, por lo tanto, desincentiva la compra de vehículos eléctricos, especialmente para aquellos que realizan desplazamientos largos o frecuentes.
En 2025 esto cambiará. Se prevé un importante crecimiento de los puntos de recarga ultrarrápidos que, aunque en este momento apenas representan el 5 % del total, irán aumentando tanto en número como en accesibilidad. Estas estaciones capaces de ofrecer potencias superiores a los 350 kW, sí permiten la recarga completa de un vehículo en menos de 15 minutos, lo que hace más viable y atractiva la opción eléctrica. Este desarrollo de una red de carga rápida y accesible en zonas de alta demanda como autopistas y centros urbanos, acelerará la transición hacia una movilidad más sostenible y ayudará a cumplir con los objetivos climáticos europeos.
2. Diversificación y electrificación de toda la cadena de transporte
La electrificación de flotas iniciará su consolidación durante el próximo año. Para las empresas, el cambio de vehículos de combustión interna por eléctricos tanto en las redes logísticas como en el transporte comercial -como camiones, autobuses o furgonetas-, supondrá la reducción de las emisiones de CO2, disminuirá el gasto de combustible e impulsará la adopción de tecnologías más sostenibles y eficientes, que ayudarán a las empresasa alinearse con las políticas de reducción de emisiones y a cumplir sus objetivos de sostenibilidad, mejorando así su imagen reputacional.
3. Movilidad como Servicio (MaaS)
2025 será el año de la consolidación de las plataformas MaaS (Mobility-as-a-Service). Esta solución consiste en la integración de diferentes servicios de transporte público, privado y compartido en una única plataforma digital para promover el uso de un transporte particular más económico y flexible y, además, contribuir a la reducción de las emisiones de CO2 y mejorar la calidad del aire de nuestras ciudades.
Así, opciones como el transporte público eléctrico (buses, metros y trenes), los coches, motos bajo demanda (carsharing y ridesharing) y la micromovilidad (bicicletas y patinetes eléctricos), se afianzarán como alternativas para facilitar esa nueva movilidad urbana más sostenible y eficiente.
4. Ciudades inteligentes, silenciosas y sostenibles
Otra de las contribuciones que la movilidad eléctrica está aportando a nuestras ciudades es el silencio.
Políticas urbanas como la creación de Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), el impulso de infraestructuras de carga ultrarrápida y el fomento de incentivos fiscales para la electrificación del transporte están favoreciendo que tanto ciudadanos como empresas adquieran vehículos eléctricos. Esta transformación no solo contribuye a la sostenibilidad ambiental, sino que también está dando lugar a ciudades más silenciosas. La eliminación progresiva de los ruidos generados por los motores de combustión interna reduce la contaminación acústica, lo que no solo mejora la calidad de vida en los entornos metropolitanos, sino que además está alineada con los objetivos de un futuro urbano más eficiente, sostenible y respetuoso con el medioambiente.
5. Mejora en la interoperabilidad de los sistemas de recarga
A medida que el sector de la movilidad eléctrica crece, tanto los operadores de recarga como las plataformas de servicios de movilidad seguirán trabajando para mejorar la experiencia de usuario. Uno de los avances más importantes para 2025 será la mejora en la interoperabilidad de las redes de recarga, lo que permitirá a los conductores de vehículos eléctricos gestionar todas sus necesidades de carga a través de sistemas unificados. Desde realizar el pago a través de una aplicación, hasta la posibilidad de reservar un punto de recarga en una ubicación y hora determinada (sea cual sea la marca, el operador o la situación del mismo). Este tipo de mejoras no solo optimizarán el tiempo del usuario, sino que además garantizarán la disponibilidad y el estado de las estaciones de recarga en tiempo real hasta llegar, por fin, a convertirla recarga en un acto tan sencillo y cómodo como repostar en una gasolinera.
"En Electra creemos que la movilidad eléctrica será la gran protagonista del transporte urbano y empresarial para 2025. Nuestro objetivo es liderar esta transición a través de la creación de una red de estaciones de recarga ultrarrápidas, y de un ecosistema de movilidad capaz de potenciar tanto la competitividad empresarial como la calidad de vida en las ciudades", concluye Bastien Verot, co-CEO de Electra España.