Según el 'Financial Times', Shein remitió la semana pasada el folleto de su oferta pública inicial (OPI) a la Bolsa de Hong Kong y a la Comisión Regulatoria de Valores de China (CSRC, por sus siglas en inglés) para dinamizar el caso abierto en Gran Bretaña.
Shein logró la aprobación del documento por parte de la CNMV británica hace unos meses, pero esta no fue aceptada por su homóloga china.
El motivo estaría en el lenguaje empleado a la hora de evaluar los riesgos, en concreto, en lo referido a las actividades realizadas en la región de Xinjiang, hogar de la minoría uigur. Pekín ha sido acusada repetidamente de vulnerar los derechos humanos de este grupo étnico.
Las fuentes consultadas por el diario inglés afirman que, de optar las autoridades británicas por aceptar un folleto del gusto de China, Shein convertirá Londres en su plaza financiera predilecta para negociar acciones y levantar capital.