Concretamente, la compañía ha abierto mercado en Kazajistán, donde ha conseguido posicionar sus tés e infusiones en AAS Foods, distribuidor y comercializador de productos alimenticios en todo el país, y en Esentai Gourmet, una gran superficie situada en Almaty, la antigua capital durante la época soviética y la ciudad más poblada del país.
Para cerrar este acuerdo, Coffee Center ha contado con el apoyo de ACCIÓ -la agencia para la competitividad de la empresa, del Departamento de Empresa y Trabajo- a través de la Oficina Exterior de Comercio e Inversiones en Moscú, que les facilitó la agenda de contactos y potenciales clientes. La empresa envió una muestra de su producto hace dos años y recientemente ha cerrado este acuerdo de forma virtual por la pandemia de la COVID-19.
Actualmente, la empresa factura casi € 6 millones anualmente y de cara al próximo año prevé llegar a mantener esta cifra y alcanzar los niveles prepandemia. De esta facturación, un 5% del total (€ 350.000), se dedica a la exportación, principalmente a países de Europa del Este, pero también a México e Italia.
Los pedidos de Coffee Center en Kazajistán se centran básicamente en dos líneas de productos. Por un lado, la línea Alma Home y Alma Fit, un tipo de té orgánico, ecológico, sostenible y con el certificado de que todo el material utilizado es 100% biodegradable, por lo que la seda, el hilo o el papel se desintegran en menos de un mes por medio del compostaje. Y por otro, la línea The Capsoul, una colección de tés a granel de sabores exóticos como mango, piña colada, maracuyá o mandarina, pensados ??sobre todo por el público más joven.
Según el Export Manager de Coffee Center, Sonia Martí, “ hace tiempo que estamos introducidos en los países de Europa del Este y queríamos abrir mercado en Asia Central. Kazajistán es actualmente como la Rusia de los años 90. Hay ganas de apertura y es, por tanto, un mercado con un gran potencial. Nuestro pedido actual es pequeño en términos económicos, pero ya estamos dentro: esto es lo más importante para seguir creciendo”.
Martí añade que “ Kazajistán tiene costumbres muy similares en los países de Europa del Este, como Rusia, Ucrania o Moldavia, y beben té a todas horas, un factor clave para conseguir introducir nuestra gama de tés. La línea de café, en cambio, es prioritaria y grande en el mercado nacional”. Para el Export Manager, “una vez estemos consolidados en Kazajistán, queremos entrar en Uzbekistán, y posteriormente también querríamos explorar los otros mercados de Asia Central como Azerbaiyán o Kirguistán”.
La empresa tiene 55 trabajadores y su sede está ubicada en Aiguaviva (Girona). Dispone de dos fábricas; la de tés e infusiones está ubicada también en Aiguaviva, y la de cafés en el Vallès Oriental.