De este modo, el organismo catalán, dependiente de la Generalitat de Cataluña, lanza un órdago contra IAG asegurando que se concentraría la oferta de vuelos en un único operador, con un hub ubicado en Madrid. Algo que repercutiría “negativamente en el consumidor” al verse afectada la competencia entre El Prat y Barajas con vuelos que conectan ambos destinos, por ejemplo, con Palma de Mallorca
Por tanto, el organismo alerta de que si la compra se culmina, IAG tendría “un total monopolio” en las rutas que conectan Madrid y Barcelona. “Si se autorizara la operación sin la sujeción a compromisos, el grupo IAG se convertiría en el único operador en los vuelos entre Madrid y Barcelona y, por tanto, pasaría a ofrecer este trayecto en régimen de monopolio”, subraya la ACCO. “Actualmente, este trayecto lo realizan Iberia y Vueling, del grupo IAG, con 107 vuelos semanales (88,43%), y Air Europa, con 14 vuelos semanales (11,57%). Por tanto, con la adquisición de la segunda por el primero, todos los operadores pasarían a ser del grupo IAG”, ahonda la institución.
El tren, posible competidor que salve el monopolio Un monopolio aéreo que, sin embargo, la autoridad catalana señala que tendrá competencia con la reciente liberalización del mercado del tren en España, que trajo nuevos intento de compra y propone “revisarlo” con limitaciones o exigencias. Sobre todo ante la posibilidad de que IAG aglutine el 82,95% de la cuota del mercado en Cataluña, cuando actualmente tiene el 55,81%.