Así, en un comentario de mercado elaborado por Silvia Dall’Angelo, Senior Economist en Federated Hermes, señala sobre cómo será la recuperación económica en la segunda mitad del año que: “A juzgar por los datos económicos recientes, los indicadores adelantados y los fundamentos, es probable que la recuperación continúe a un ritmo sostenido y se amplíe en el segundo semestre, aunque las tasas de crecimiento global probablemente se estabilicen, ya que el crecimiento en EE.UU. probablemente ha tocado techo”.
En este sentido, Dall’Angelo destaca como: “La producción mundial está en vías de alcanzar la estimación del FMI de un crecimiento del 6% en 2021, gracias a los nuevos avances en los programas de vacunación y a las políticas acomodaticias, especialmente en las economías avanzadas. Esta sería la tasa de crecimiento más rápida desde 1980 (inicio de la serie del FMI para el PIB mundial), tras la mayor contracción registrada en 2020. Aunque es probable que EE UU siga liderando la recuperación, el crecimiento probablemente haya tocado techo, y es probable que el impulso se debilite aún más a finales de año, ya que la fiebre del azúcar de los estímulos fiscales empieza a desaparecer”.
Por lo que respecto a la zona euro, la experta pone en foco en cómo “ha empezado a recuperar el terreno perdido y probablemente se acelerará en el segundo semestre, con unas perspectivas de crecimiento respaldadas por los primeros desembolsos del Fondo de Recuperación de 750.000 millones de euros”.
Mientras que China, añade: “Experimentó lo que parecía una recuperación en forma de V en el segundo semestre de 2020, se ha ralentizado en la primera mitad del año. Sin embargo, es probable que el crecimiento se reactive, ya que las autoridades han señalado un cambio hacia políticas más favorables, empezando por un recorte de 50 puntos básicos en el coeficiente de reservas obligatorias para los bancos, lo que implica unas condiciones de crédito más fáciles”.
En el mismo comentario, Silvia Dall’Angelo alerta de los posibles riesgos que pueden enturbiar la –ansiada por todos- recuperación. Así, la Senior Economist de Federated Hermes pone de relevancia la “desigual recuperación entre regiones, los países y los sectores dentro de ellos”; y destaca: “Las divergencias han sido especialmente pronunciadas entre las economías emergentes y las desarrolladas, lo que refleja las diferentes capacidades para aprovechar los recursos necesarios para contener la pandemia y apoyar la recuperación. Esto plantea riesgos a corto plazo, ya que podrían surgir mutaciones del virus más problemáticas en lugares donde la pandemia no se ha abordado adecuadamente, como también ejemplifica recientemente la variante Delta”.
Bajo este prisma, Dall’Angelo advierte que: “Los riesgos (y las oportunidades) son aún más pronunciados a medio plazo. A pesar del bombo y platillo de "reconstruir mejor", no está claro que existan políticas contundentes que favorezcan una recuperación ecológica e inclusiva. Por lo tanto, existe el riesgo de volver a un escenario macroeconómico anterior a la crisis de la Covid, dominado por un lento crecimiento de la productividad, el aumento de las desigualdades y una crisis climática en ciernes”.
¿Qué pasará con la (temida) inflación?
“Los efectos de base en la energía, la subida de los precios de las materias primas y las limitaciones de la oferta relacionadas con la COVID-19 ya han hecho subir la inflación de forma generalizada. Los efectos de cuello de botella mantendrán la inflación elevada en los próximos meses, pero deberían desaparecer una vez que se normalice la dinámica de la oferta y la demanda”, señala la experta en la nota remitida a los medios.