Las herramientas de visual thinking utilizan elementos visuales para explicar conceptos complejos. Se desarrollan bajo el soporte de la neurociencia, que defiende que el cerebro trabaja mejor con imágenes que con palabras, las retiene durante más tiempo y las interpreta de forma más certera y homogénea. Según los expertos, el cerebro procesa mejor las imágenes y recuerda el 65% de lo que se ve dibujado frente a un 10% de lo que se lee.
Bautizada por Rudolf Arnheim en su obra fundacional “Visual Thinking”, de 1969, esta metodología parte de la base de que “la visión es el medio primordial del pensamiento” y la percepción visual es imprescindible para la formación de conceptos mentales. De esta forma, los elementos visuales simplifican conceptos complejos, ayudan al cerebro a enlazar nociones y a sintetizar, estimulan el pensamiento, activan la creatividad y potencian la memoria.
CaixaBank Tech arrancó con el uso de la metodología visual thinking en 2022, a través de su equipo de Transformación, dedicado a fomentar la innovación en la compañía y potenciar el pensamiento creativo de sus equipos. Por ahora, ha implantado esta técnica en procesos de ideación de producto, divulgación de proyectos estratégicos, atracción de talento y comunicación.
Las diferentes técnicas de visual thinking están resultando especialmente útiles en el análisis y toma de decisiones, por su capacidad de sintetizar conceptos clave, compartir conocimiento con los equipos, focalizar, conceptualizar y organizar el pensamiento. Además, la técnica del pensamiento visual se ha revelado de gran ayuda para potenciar la innovación y la creatividad.
Diversidad de técnicas
La metodología visual thinking incluye diferentes técnicas que, a pesar de compartir una base común, se desarrollan de forma distinta.
Destacan el Sketchnoting (o toma de apuntes visual), por el que se plasma un proyecto creando metáforas visuales. Si se trata de volcar in situ la información de una ponencia se llama graphic recording. El resultado es una foto formada por dibujos, etiquetas y formas que convierten la información en una imagen sencilla y fácil de entender.
Por otra parte, los Mapas visuales son formas de organizar la información y, sobre todo, son métodos eficaces para extraer y memorizar información y para procesos de toma de decisiones. Los hay de muchos tipos: mapas mentales, conceptuales, de burbujas… o la llamada técnica Ishikawa: una herramienta que ayuda a identificar las causas de un problema y se utiliza para resolver asuntos complejos.