Así lo expone el supervisor en un artículo publicado este jueves en la Revista de Estabilidad Financiera y titulado 'Análisis económico de las comisiones bancarias, su régimen jurídico y su relevancia para la estabilidad financiera'.
El análisis explica que la banca y las entidades financieras estarían cambiando su modelo de comisiones hacia un marco "en el que los costes se repercuten de forma más directa y diferenciada por servicio", especialmente los ingresos por servicios de pago (como cuentas corrientes, tarjetas bancarias o transferencias).
Esto se reflejaría en la aparición de nuevas tipologías de comisiones o de nuevas formas de aplicación en servicios concretos que antes se englobaban en categorías más generales, fomentado, en algunos casos, por diversos condicionantes tecnológicos.
Esto conllevaría un fortalecimiento de las comisiones individualizadas por la prestación de servicios como un canal de ingresos que tiende a ser "más relevante" y a poner en relieve el valor añadido de la operativa bancaria. También facilitaría nuevos mecanismos para estimular la vinculación entre el cliente y la entidad.
El Banco de España considera que la necesidad de reforzar la rentabilidad podría ser una de las motivaciones para esta transformación.
"En el caso de los servicios de pago, además, destaca como potencial factor de cambio la propia evolución del modelo en su propia operativa, con un uso creciente de herramientas digitales, la aparición de métodos de pago alternativos nacidos a raíz de estas y el surgimiento de nuevos competidores que podrían ofrecer servicios a menor coste", añade.
En este sentido, el artículo expone que la respuesta de los clientes al nuevo modelo derivado de la digitalización de las entidades "supone el mayor reto, en especial ante la aparición de los nuevos operadores digitales (fintech y bigtech)", una situación impulsada por la liberalización recogida en la Directiva europea de Servicios de Pago II.
El supervisor señala que estos nuevos competidores todavía tienen un "peso testimonial" en la concesión de crédito en las economías europeas, aunque presentan un crecimiento "sostenido" y su modelo de negocio tiene la particularidad de poder ofrecer servicios de pago a menor coste gracias a una infraestructura técnica más eficiente y a la potencial monetización de la información de uso de sus clientes.
Asimismo, el Banco de España prevé que la irrupción de nuevos mecanismos de pago digital, como las transferencias inmediatas, lleve a una transformación del propio modelo de pagos y, como consecuencia, a un cambio en el modelo de cobro de comisiones asociadas.
También recuerda el supervisor la posible emisión de un euro digital por parte del Banco Central Europeo (BCE), que en julio de 2021 aprobó la realización de un estudio sobre su viabilidad, diseño, riesgos y requerimientos operativos y legales que comenzará en octubre y se prolongará durante dos años.
"En función de su diseño final, este instrumento de pago, que abarcaría también las transacciones entre particulares y comercios, podría tener una incidencia significativa sobre los ingresos por comisiones", explica.