También startups españolas, como la andaluza Scoobic, están innovando con vehículos eléctricos, cada vez más demandados.
Hablamos con José María Gómez Márquez, CEO y fundador de Scoobic.
“Todos los socios fundadores compartimos la pasión por el motor. Somos pilotos de coches o motos y venimos de trabajar en el mundo del motor los últimos 25 años en nuestra empresa matriz, AMG Servicios, que se dedica al montaje de infraestructuras para el Mundial de Motos GP, Mundial de Rally, etc., en más de 10 países: de ahí nuestra experiencia en el sector.”
Sin embargo, había una necesidad que cubrir, un hueco en el mercado. “Un día mi hijo, Álvaro Gómez, CEM de Lola Market, startup súper on-line que se dedica a llevar la cesta de la compra a domicilio, nos vino con un problema: ¿por qué no hay un vehículo intermedio entre una furgoneta y una scooter? Ellos tenían un gran problema en los repartos, puesto que la cesta de la compra no cabe en una motocicleta y les sobra espacio en una furgoneta, que son más difíciles de manejar y aparcar en ciudad, sin molestar o recaudar multas de tráfico. Éste fue el origen de Scoobic”.
“Scoobic es un vehículo 100% eléctrico, ágil y rápido en ciudad, y con gran capacidad de carga, cuenta con nuestra patente de sistema antivuelco de la caja de carga, y al ser de tres ruedas, otorga mayor estabilidad y seguridad al conductor. Tenemos dos modelos, Scoobic light y Scoobic mini, con diferente capacidad de carga”.
La pandemia ha sido otro factor decisivo para la expansión del mercado de este tipo de vehículos. Como afirma José María Gómez: “El aumento del E-commerce, en gran medida por el Covid-19, ha propiciado un gran aumento de las entregas a domicilio y de la logística de última milla. Las empresas de distribución saben que ya cada vez son más más demandadas las entregas en casa, y están adaptando su modelo de reparto y sus vehículos, pero aún queda mucho camino por recorrer”.
El nicho de mercado de Scoobic es la última milla, por lo que trabajan directamente con empresas del sector público y privado.
Puede haber un gran mercado nacional de estos vehículos. “El mercado asiático es fuerte pero en España empresas como la nuestra podemos alcanzar una importante cuota de mercado diseñando y fabricando vehículos eléctricos de calidad, con un alto componente innovador y de I+D, y produciendo en España, lo que hace que los plazos de entrega sean menores y se abaraten los costes al no tener que importarlos, debido a la gran subida de precios que ha experimentado el sector marítimo en el último año”.
A la hora de realizar entregas, estos vehículos resultan más económicos que los habituales. “Nuestros vehículos con ciclomotores pero con la capacidad de carga de una furgoneta, por lo tanto tienen un precio más económico respecto a las furgonetas eléctricas como en rentabilidad con los vehículos de gasolina o híbridos. Para las empresas que adquieren estos vehículos, es tan importante el precio de compra como la rentabilidad de los vehículos, y nuestros Scoobic aumentan en un 30% las entregas de las empresas, lo que redunda en mayores beneficios.”
El plan de Scoobic para el futuro es ambicioso, a pesar de su modestia inicial. “Nuestro proyecto prioritario es montar una fábrica de vehículos eléctricos ligeros, es una inversión de en torno a € 13 millones y esperamos tenerla iniciando producción a principios de 2023. La producción anual prevista está en torno a las 15.000 unidades. Y crearemos más de 200 puestos de trabajo en sus inicios. Pretendemos romper la dependencia con Asia en la fabricación de vehículos eléctricos y contribuir a la economía local, montando la primera fábrica de vehículos eléctricos en Sevilla y Andalucía”.