La falta de stock por la crisis de microchips está provocando que la demanda de vehículo nuevo se traslade al usado, lo que tiene como consecuencia esta reducción en el tiempo de venta de un coche usado diésel o gasolina.
Sucede lo mismo con los vehículos 'ECO', en cuyo caso el tiempo que las redes oficiales tardan en darle salida se ha reducido en medio mes, al pasar de los 89 a los 72 días.
El vehículo usado se está convirtiendo en la opción predilecta para muchos conductores, lo que se refleja en el aumento de las búsquedas 'online', que crecieron un 24% en 2021, mientras que las de nuevos cayeron un 2%, según datos de Google para Sumauto.
No obstante, este incremento de la demanda conlleva una disminución del stock y un encarecimiento gradual del precio. En concreto, el stock del vehículo de ocasión de diésel y gasolina cayó un 26% en los últimos doce meses, mientras que la oferta de etiqueta ECO se mantuvo en los mismos niveles de hace un año, pero un 33% menos que en junio de 2021, cuando la oferta de estos coches alcanzó su máximo.
Esta falta de vehículos usados en exposición ha provocado un encarecimiento de los precios en el último año del 12,2% en el caso de un gasolina o diésel, hasta rozar los 19.000 euros de media, y de un 8,3% de los automóviles con etiqueta 'ECO', con un importe medio que supera ya los 29.000 euros.
"La presión sobre la demanda en el mercado de usados está agilizando la rotación de los vehículos; algunos se venden casi solos, pero otros necesitan una gestión eficiente del stock y una política dinámica de precios", ha explicado el director general de Sumauto, Nicolás Cantaert.