El local de Martorell se encuentra en la Avinguda del Congost número 2, mientras que el de Castelldefels está ubicado en el Centro Comercial Ànec Blau. Ambos establecimientos cuentan con sistemas de refill de bebidas, autopedido, wifi gratuito y servicio para llevar. Además, el restaurante de Martorell ofrece la opción de recoger pedidos desde el coche y ambos proporcionan envío a domicilio a través de su plataforma de reparto propia, garantizando la máxima calidad del producto y un control total del proceso, desde la elaboración hasta la entrega.
La marca especializada en pollo ha inaugurado su nuevo restaurante en Martorell con la compañía de Xavier Fonollosa, alcalde de Martorell, la regidora de promoción económica, comercio, mercados y turismo, Rosa M. Cadenas, y la regidora de juventud, Raquel Sans, quienes han respaldado esta nueva apertura en la ciudad y su contribución al desarrollo local.
Durante el evento, Nicolás Ariza, responsable de operaciones de Popeyes® España, ha destacado que “estamos muy emocionados de acercar el auténtico sabor de Popeyes® a Martorell con la apertura de nuestro nuevo restaurante, que no solo marca nuestro primer establecimiento en la localidad, sino que también ha supuesto la creación de 30 nuevos puestos de trabajo “.
“Hace apenas dos semanas, tuvimos el honor de inaugurar también nuestro primer restaurante en Castelldefels. Estas dos recientes aperturas son hitos significativos en nuestro camino de crecimiento y reflejan un paso clave en nuestra expansión por Cataluña. Queremos seguir ampliando nuestra familia Popeyes® y compartir el mejor pollo crujiente con más personas, y en más rincones de Cataluña”, ha añadido Nicolás Ariza.
Por su parte, Xavier Fonollosa, alcalde de Martorell, ha destacado la importancia de la apertura en el municipio, afirmando: “la llegada de este nuevo establecimiento al Polígono Industrial El Congost representa un nuevo impulso a la oferta gastronómica de esta zona y de todo el municipio. La apertura de este tipo de negocios también contribuye a generar empleo para nuestros ciudadanos y ciudadanas y enriquece el tejido empresarial local, uno de los objetivos prioritarios que tenemos en Martorell”.
En sus recién inaugurados establecimientos, Popeyes® continúa fiel a su propuesta gastronómica única: auténtico pollo frito crujiente al estilo Louisiana, elaborado exclusivamente con pollo fresco proveniente de granjas españolas, principalmente ubicadas en Cataluña además de Castilla y León.
Los clientes podrán disfrutar de esta especialidad a través de una variada carta que incluye piezas y tiras crujientes de solomillo de pollo, hamburguesas con el característico pollo rebozado o a la plancha, o nuggets elaborados con 100% pechuga de pollo, disponibles en versiones crujientes o grilled.
La apertura de los restaurantes en Castelldefels y Martorell lleva a Popeyes® a un total de 147 establecimientos en España, destacando el notable crecimiento de la marca desde su llegada en 2019. Con una presencia consolidada en todas las comunidades autónomas, Popeyes® continúa expandiendo su base de clientes, conquistando paladares y ofreciendo su inconfundible pollo frito al estilo Louisiana.
La calidad como pilar fundamental
La cadena especializada en pollo, fundada en Nueva Orleans en 1972, cuenta con más de 50 años de experiencia en el sector y más de 4.300 restaurantes en EE.UU. y en todo el mundo. Popeyes® es una de las compañías del sector QSR mejor valoradas a nivel mundial y la marca especializada en pollo número uno en EE.UU.
La sabrosa comida de Popeyes® se inspira en sus raíces, con sabores típicos de Louisiana, donde se cocina respetando la riqueza y mezcla de sabores herencia de su historia multicultural.
La calidad es un valor fundamental en Popeyes® y engloba desde las materias primas a la elección de proveedores y por supuesto, al proceso de elaboración y la trazabilidad de toda la cadena de suministro. De este modo, la compañía apuesta por un nuevo concepto de comida rápida y cocinado lento. El pollo Popeyes® es fresco, 100% español, proviene de granjas ubicadas en Castilla y León y Cataluña, y se marina durante 12 horas en una mezcla de especias cajún. Los chefs de la marca rebozan cada pieza a mano en el restaurante para mantener los estándares más altos de calidad y ofrecer el mejor producto al consumidor: crujiente por fuera y jugoso por dentro.