De esta forma, las prendas de Infinite Athletic requieren un 60% menos de energía y emiten un 60% menos de CO2 en comparación con las confeccionadas con poliéster virgen. Y lo más importante: permiten un ahorro del principal recurso natural como es el agua, de más del 75%.
Además de recuperar los cordajes inutilizables que se generen durante la Davis Cup by Rakunten Finales que se juega en Madrid, los fundadores han llegado también a un acuerdo con diferentes clubs empresas y entidades como el Reial Club de Tennis Barcelona, Decathlon, o la Real Federación Española de Tenis, entre otros, para la instalación de puntos de recogida de los cordajes. Asimismo, en esos puntos también se podrán depositar las prendas al final de su vida útil para ser recicladas de nuevo y convertirse en prendas infinitas.
Durante las finales de la Davis Cup en Madrid se prevé la recogida de unos 1.100 cordajes, que serán transformados en 230 camisetas técnicas 100% recicladas y reciclables.
“Somos la primera empresa en la historia del tenis que ha logrado reciclar el poliéster de los cordajes para darle un segundo uso”, asegura Francesc Jiménez, fundador de Infinite Athletic junto a Isaac Nogués y François Devy.
Un jugador semiprofesional consume unos 10 cordajes a la semana de media y uno profesional, unos 20. Sumados a los cordajes que desechan los jugadores amateurs, se calcula que cada año acaban en vertederos o incineradoras 60 toneladas de este residuo en España (cerca de 400 toneladas en Europa).
Por otro lado, las prendas han sido diseñadas para que al final de su vida útil puedan volver a ser recicladas de forma infinita (de aquí el nombre de la empresa). Solo hay que tirarlas en los puntos de recogida instalados en los Clubes y tiendas desde donde se convertirán en una nueva prenda.
Además de ser sostenibles, las camisetas y pantalones de Infinite Athletic son aptos para la práctica del deporte ya que son transpirables, de secado rápido, ligeras y con tecnología anti-olor.