En el corazón del distrito madrileño de Retiro, la compañía comercializa dos propiedades singulares. La primera, un ático dúplex de 540 m² con 170 m² de terraza y vistas abiertas al parque, está valorada en 9,5 millones de euros. Incluye cocina de alta gama, tres suites con baño privado, zona de servicio y acceso directo desde el ascensor. La segunda, un piso de 471 m² en Jerónimos por 9,2 millones, completamente reformado con acabados de Porcelanosa, techos de 3,7 metros y 14 balcones. Su dormitorio principal supera los 80 m² e integra dos vestidores, baño en suite y vistas al parque. Ambas viviendas ofrecen una localización privilegiada junto a la Puerta de Alcalá y el Museo del Prado.
En la Costa Brava, la joya arquitectónica es una villa de obra nueva de 1.705 m² en Platja d’Aro, valorada en 10,5 millones. Se encuentra en construcción, con posibilidad de personalizar distribución y acabados. Dispone de seis dormitorios, nueve baños, terrazas con vistas panorámicas, piscina, ascensor, gimnasio, bodega y garaje para seis vehículos. La vivienda está orientada al mar y cuenta con acceso directo a una cala privada, lo que refuerza su carácter exclusivo y su atractivo como activo de inversión (imagen render de la propiedad a continuación).
La cuarta propiedad, un palacete modernista en el Paseo de Gracia de Barcelona, alcanza los 12 millones de euros. Con 700 m² interiores y 300 m² de terraza, destaca por conservar elementos originales de principios del siglo XX como frescos, vitrales, mosaicos y barandillas de forja. Entre sus espacios principales destacan un salón de 180 m², biblioteca, sala de lectura, cocina-office, jardín privado con fuente de mármol y porches semicubiertos. La distribución permite usos residenciales o institucionales en una de las ubicaciones más cotizadas de la capital catalana (fotografía del interior de la propiedad a continuación).
“Estas viviendas no solo representan el máximo lujo residencial en España, sino también una apuesta segura por la exclusividad, la ubicación y el diseño. Son propiedades con valor arquitectónico, histórico o paisajístico que las convierte en activos únicos”, destacan los socios de Walter Haus. “Nuestro objetivo es ofrecer experiencias residenciales excepcionales, tanto para quienes buscan vivir como para quienes buscan invertir”.