La segunda edición del Barcelona Startup Congress (BSC), celebrada de forma online durante los pasados 23 y 24 de marzo, ha reunido a más de 2.500 asistentes multiplicando por seis los datos registrados en la anterior cita. Bajo el título ‘Emprendimiento e innovación en tiempos de pandemia’, el evento ha contado con un total de 70 ponentes, 20 mesas y 17 horas de contenido a través de las cuales se ha debatido sobre sectores clave para la economía.
Entre las distintas temáticas han destacado el futuro del real estate, la gastronomía, la industria cultural, las nuevas formas de comunicación o la inversión en startups.
En este sentido, según Raimon Recoder (director del BSC) una de las principales conclusiones extraídas de esta edición es “la importancia entre la colaboración entre lo público y lo privado. En todas las mesas nos hemos dado cuenta de este hecho. Las empresas privadas tienen un valor importantísimo, pero el sector público es también un actor fundamental; no sólo porque apoya a nivel recursos, si no también porque es capaz de asumir partidas importantes de dinero para asumir estas iniciativas”.
Bajo esta premisa, y dejando claro que “a través de la tecnología se ha conseguido un avance muy importante”, Recorder pone de manifiesto cómo el sector emprendedor y tecnológico “tiende a encontrar soluciones. Va con el perfil emprendedor. Está acostumbrado asumir retos, superarlos y hacerlos con perspectiva de futuro. Ha sido una ventana de oportunidad”.
Entre los oradores más representativos han destacado Ismael Clemente, CEO de Merlin Properties, José Andrés, chef internacional con base en Washington, Anna Gener, CEO de Savills Aguirre-Newman en Barcelona, Juan Carlos Tous, CEO de Filmin, Rob Cassedy, CEO de Wallapop, Ignasi Giralt, Country Growth Manager de Revolut España, Yellow Mellow, creadora de contenido en Youtube o Itzan Escamilla, actor en Netflix y fundador de Kopskam.
Así, los directores del BSC -Raimon Recoder y David Peris-Mencheta- señalan que: “Para Barcelona, es altamente positivo que figuras reconocidas y de talla internacional den visibilidad al valor de la ciudad como uno de los hubs de innovación más potentes en Europa y en el resto del mundo”.
Una de las consecuencias de la COVID-19 ha sido celebrar de manera únicamente virtual la segunda edición del Barcelona StartUp Congress, hecho que desde la organización destacan: “Nos ha dado la lección de que gracias al formato online podemos llegar mucho más lejos. Era un formato que en 2012 ni se planteaba, pero la COVID-19 ha abierto los ojos a poder hacer nuevas cosas. Antes estábamos limitados a un aforo, ahora llegamos a cualquier casa del mundo”.
Con la mirada puesta en la III edición, que posiblemente será una hibridación entre evento virtual y presencial y referido a la temática y nuevos objetivos, Recoder considera que: “Trataremos de afianzar el congreso dentro del emprendimiento, innovación y atracción de talento. Si todo va bien se hará en un contexto en el que la pandemia haya quedado atrás, y veamos cómo han quedado los mercados después de la COVID-19. Debemos enfocar los contenidos a la situación y que aporten mayor valor a la sociedad.”
Contexto y legislación en el ecosistema
La última vez que InfoNegocios Barcelona habló con Raimon Recoder señaló que “la financiación de startup tiene tres problemas principales en el Estado español: hay falta de inversión en etapas avanzadas, el capital riesgo es todavía inmaduro y las primeras rondas son demasiado pequeñas”.
En este sentido, Recoder señala que “se ha avanzado en cuanto a perspectivas. El Gobierno ha planteado la elaboración de una Ley Startup que permitirá incentivos fiscales, atracción de talento y financiación. Nos alegra que se dé un paso adelante en este sentido, para poder hacer nuevos proyectos dentro de nuestro país. Veremos si esta propuesta de Ley se hace efectiva y que implica, porque hasta ahora no tenemos muchos detalles concretos.”
Ante las últimas novedades del sector, las últimas rondas de financiación y hechos acontecidos en el ecosistema startup patrio Raimon Recoder tiene clara la respuesta a la pregunta de si España es un país de unicornios: “Por ahora no. Si comparamos España o Barcelona con otros países podemos ser un referente, pero nos queda mucho por delante. Tenemos sólo 3 o 4, son pocos todavía”.
Y en esta línea concluye: “Si seguimos trabajando con eventos como el BSC, administraciones públicas apoyando – tanto a nivel de leyes, como fiscal- si seguimos con eso pero con una apuesta real, sincera, fuerte, de medidas que sean palpables y reales lo vamos a ser. Decir que hoy España es un país de unicornios, sería precipitado”.