Más de un 11% de la población española ya invierte en criptomonedas, es decir, cerca de 4.5 millones de personas, según la Asociación de Usuarios Financieros. Además, el Banco de España publicaba hace unos días un informe sobre el uso de criptomonedas en el que revelaba que España ocupó en 2021 el quinto puesto a nivel europeo en volumen de transacciones de criptoactivos, con cerca de € 60.000 millones, tan solo por detrás de Reino Unido, Francia, Alemania y Países Bajos, y por delante de países como Suiza e Italia.
Oliver Sachgau, experto en educación sobre criptomonedas e inversiones en Vivid, la plataforma móvil de servicios financieros, revela con cinco criptomonedas con potencial -más allá del Bitcoin y el Ethereum- que ya acumulan el 27.1% de trades en 2022, según los propios datos de la compañía.
1. Solana
A nivel mundial, Solana es actualmente la quinta criptomoneda más grande por capitalización de mercado. Pero, teniendo en cuenta que comenzó el año pasado cotizando a casi € 2 y ahora está en € 70, es fácil entender por qué algunas personas piensan que aún queda mucho camino por recorrer. Fue la primera criptomonedas en utilizar la Proof-of-History y su red puede procesar entre 50.000 y 65.000 transacciones por segundo, mientras que Ethereum sólo realiza entre 15 y 30, y Cardano 250. Además, Solana lo hace por una comisión realmente asequible. En lo que va de 2022, Solana ha crecido un 0.6% en trades, situándose ya en un 7.2%.
2. Avalanche
Es conocida también como la "Ethereum Killer", ya que se trata de un protocolo de blockchain que se ejecuta en tres cadenas de bloques diferentes. Una blockchain se utiliza para crear nuevas monedas AVAX y procesar las transacciones, para lo que utiliza el consenso Proof-of-Stake de bajo consumo. Otra se encarga del staking y la tercera se ocupa de los contratos inteligentes que están codificados en la blockchain. Debido a esta particular estructura y a todo lo que los desarrolladores pueden hacer con ella, se considera una plataforma de plataformas. El proyecto que hay detrás es realmente ambicioso y, aunque su potencial ya comienza a ser visible, aún le queda mucho por desplegar. Esta criptomoneda cuenta ya con un 3.5% de trades, habiendo experimentado en tan solo 4 meses un crecimiento del 0.7%.
3. Decentraland
Cuando Zuckerberg cambió el nombre de su empresa por Meta, todo lo relacionado con el metaverso experimentó un fuerte repunte, incluido MANA, el token de Decentraland, que actualmente cuenta con un 6% de trades -frente al 4.2% con el que cerró 2021. Decentraland es una plataforma de realidad virtual que funciona con Ethereum. Los jugadores de este mundo virtual en 3D utilizan criptoactivos para comprar o vender terrenos y objetos, y esta plataforma ha desarrollado su propia moneda, conocida como MANA. Los usuarios pueden comprar y vender bienes inmuebles digitales utilizando MANA mientras exploran, interactúan y juegan dentro de este mundo virtual.
4. Cardano
Cardano vio la luz en 2017. Es una plataforma de blockchain que utiliza una fracción de la energía de Ethereum y Bitcoin, pero procesa las transacciones más rápidamente. Sus desarrolladores han trazado una hoja de ruta con cinco etapas para alcanzar su objetivo final: convertirse en un sistema descentralizado completamente autosuficiente. Será posible incluso alojar en ella otras aplicaciones y monedas digitales. La plataforma lanzó los contratos inteligentes el pasado año y ahora su trabajo se centra en las dos últimas etapas de desarrollo. Esto pone de relieve el gran potencial que tiene Cardano, el cual, a pesar de haber disminuido el porcentaje de trades en 2022 -pasando del 9.7% al 7%-, parece que continuará desarrollándose a lo largo de este año.
5. Polkadot
El principal punto fuerte de Polkadot es la comunicación. Las criptomonedas tienden a operar por su cuenta y normalmente no es posible transferir monedas o compartir información de una a otra. Polkadot fue la primera que permitió el intercambio de datos entre varias blockchains. Se basa en una red principal, denominada cadena de relevos, y conjuntos de cadenas paralelas, conocidas como parachains, que se ejecutan junto a ella. Estas parachains utilizan una especie de puentes para conectarse a otras blockchains como Ethereum. Otro punto a favor es la gestión de alto nivel que está detrás: uno de los fundadores de Polkadot es también cofundador de Ethereum. Además, esta criptomoneda ha ganado casi un 1% de trades en 2022, habiendo pasado del 3% al 3.9%.