Su chocolate caliente tiene coco, su café, también, su zumo de naranja, ¿por qué no? ¡También! En invierno y en verano, con sus cocadas y smoothies han enamorado a sus “coco lovers”.
Una limonada de coco en Colombia fue el punto inicial de la idea que Sasha Sánchez, CEO de Coco House, y su socio Lluis Furnells, han ido desarrollando. Sasha, venezolana, se vio invadida por los recuerdos de las cocadas de su país, una bebida típica en cualquier viaje a la playa. Su socio, catalán, se dejó llevar.
¿Cocadas en la Barceloneta? Ni el banco, ni familiares, ni amigos, apoyaban la idea. El miedo de saber si tomar la oportunidad de abrir el primer local en Barcelona, era real. Nada que un viaje a Menorca no pudiera solucionar. Estar cerca del mar fue todo lo que necesitó Sasha para meditar y crear Coco House, no solo como un sitio de cocadas sino como un proyecto de concientización social, vegano, vegetariano, sin gluten y consciente de la importancia de la conservación del medioambiente.
Así llega la apertura de su primer local en junio de 2019. Todo el packing de Coco House es biodegradable y compostable, lo que parece plástico es pulpa de maíz. La receptividad del público ha sido increíble y su mensaje llega a las personas. Su estrella: la cocada. Hecha a base de agua de coco, leche de coco y pulpa de coco, con ingredientes prácticamente 100% naturales, enamoraron a los españoles, aunque esta fruta no les sea precisamente muy familiar.
“En España se consigue coco, pero en su fase madura, cuando ya es coco seco y no sirve para hacer cocadas. Nosotros usamos coco verde que proviene de Tailandia. Aunque estamos estudiando la posibilidad de traerlo desde Brasil, más adelante”, explica Sasha.
En Coco House no solo hay cocadas por € 4,90, también ofrecen dulces, desayunos y bowls. Se trata de ofrecer productos diferentes en los que la fruta siempre sea protagonista, usando aceite de coco, leche de coco o mantequilla de coco, por ejemplo.
Comprar una franquicia de Coco House requiere de € 25.000, e iniciar con el negocio puede llegar a costar una inversión inicial de € 107.000, con un promedio de € 600.000 al año en facturación.
El éxito del emprendimiento que Sasha y su socio han mimado con tanto esmero se vio recompensado recientemente con el tercer lugar en el Gran Premio del Retail, organizado por Unibail-Rodamco-Westfield (URW), el primer grupo cotizado del sector inmobiliario comercial en Europa. Además del reconocimiento, ganaron € 50.000 que podrán usar para inaugurar un stand en alguno de los centros de compras de URW. De igual forma, próximamente Coco House abrirá más puertas en Barcelona y Madrid.