A la vez, los datos del estudio revelan que 33% de los españoles se siente culpable por las consecuencias en el medio ambiente de una compra online, tanto de una tienda nacional como internacional, mientras que existe un poco más de consciencia cuando se trata de devolver un producto (38%).
En ese camino, la entrega de paquetes ya es percibido como un problema medioambiental por el 50% de los encuestados. Más de tres cuartas partes (80%) estará de acuerdo en que es necesaria la creación de un certificado de confianza para la entrega sostenible y el 73% apoyaría que el gobierno interviniera y obligara a las empresas a invertir en entregas sostenibles.
También podemos ver una clara tendencia hacia las compras locales, con casi un 60% de los encuestados con una clara preferencia por la compra de proximidad. Además, un 73% de los consumidores se desplazaría a un punto de recogida cercano si esto tuviera un menor impacto para el medioambiente, al igual que optaría por otros tipos de envíos más sostenibles si la tienda online proporcionara información sobre las emisiones de cada uno de ellos.
“Aunque todavía queda mucho trabajo por hacer, poco a poco vamos avanzando hacia un mundo más sostenible. En algunas partes de la UE ya se realizan entregas con vehículos eléctricos y bicicletas, y las tecnologías que ofrecen a los consumidores horarios exactos de entrega y opciones de entrega más flexibles son cada vez comunes. Al comunicar claramente el impacto medioambiental de las opciones de entrega en el momento de hacer checkout, las tiendas online pueden dar a los consumidores la oportunidad para que elijan una opción más ecológica en lugar de una opción rápida y gratuita”, comenta Rob van den Heuvel, CEO y cofundador de Sendcloud.