A falta del cierre anual y el gran empujón de las Navidades, durante los primeros nueve meses del año -COVID mediante- las ventas de la Denominación Origen Cava se han visto reducidas hasta un 10,5%.
A pesar de esta cifra, desde la propia Denominación señalan que “el comportamiento de las ventas teniendo en cuenta la severa crisis económica y las restricciones de compra y consumo se ha comportado mejor de lo que en principio estimábamos”. En este sentido, portavoces de la D.O. Cava destacan que “el comercio exterior ha tenido mejor respuesta siendo la caída de 7,5%”.
Según las cifras, de carácter público en la web de la D.O., en 2019 se produjeron un total de 249.544.969 millones de botellas de cava, lo que supuso un incremento de 2,07% respecto al año anterior.
Así, a la espera del conteo de las fiestas de Navidad (época en la que se desataba la venta de este tipo de productos), desde la Denominación de Origen Cava se muestran optimistas y esperanzados, y aseguran que: “la gran diversidad de canales: alimentación, hostelería, online, y de mercados: más de 150 países en el mundo; hace que el cava aún a pesar de todo aguante la adversidad en la que nos encontramos”.