La Reserva Federal de Estados Unidos ha iniciado el tapering, la quita de incentivos al mercado y -se estima- subirá las tasas más temprano que tarde. Empiezan a apagar las luces para que la fiesta pierda ritmo y la resaca de la inflación sea menor.
Pero en España vemos esto:
Aquí se ha servido otra vuelta de tragos y los datos de octubre parecen no generar escarmiento alguno. La Caja de Pandora ha sido abierta y la inflación de dos dígitos anuales está cada vez más cercana.
Qué el coste de la energía, que la vivienda, que tal, que cual. Siempre hay una excusa para no tomar la decisión inevitable antes que la espiralización de precios obligue a medidas más drásticas.